La Strata 950 fue ubicada cercana a la chimenea de ventilación, en la parte más alta del cerro, de forma vertical al refugio. Estos elementos estaban contenidos en un dispositivo denominado «paloma», que consta de una tubería de PVC de alta resistencia cuyo diámetro le permite desplazarse con holgura por el interior de la perforación. Trabajó perforando un ducto de 33 cm de ancho para luego ampliarlo a un diámetro de 66 cm, espacio suficiente para ingresar a una persona e izarla hasta la superficie. Una opción que también fue planteada en la planificación previa, era la de utilizar una máquina perforadora creada para cavar pozos petrolíferos, que ofrecía la principal ventaja de romper un ducto del diámetro definitivo, o sea de 70 cm inmediatamente; además, su poder le permitiría avanzar a mayor velocidad. El día 20 de agosto, el destacado ingeniero de minas y máster en perforación por la Hughes Tool Company (actual Baker Hughes), Ricardo Vega Robles, se contacta con el Ministro Golborne para asesorarlo en la perforación de la mina «San José», recomendándole un plan n°1, el cual consistía en utilizar una máquina perforadora de gran tamaño denominada «Raise Borer» (Strata 950) – que podría ser solicitada a «Terra Service», a Kala Máster Drilling o Codelco – para realizar un túnel vertical y, un plan n°2, consistente en realizar un túnel horizontal desde un lugar cercano, con una máquina de menor tamaño denominada «jumbo».
Usando como guía un sondaje previo, la máquina Schramm T-130, operada y propiedad de la compañía estadounidense Geotec, llegó a la mina el 3 de septiembre, iniciando sus operaciones inmediatamente. La noticia provocó la alegría de todas las personas que se encontraban en la mina, y de todo el país, desatándose una verdadera fiesta nacional, en que la gente salió a celebrar a las calles, reuniéndose en puntos donde normalmente se celebran triunfos deportivos, como Plaza Italia en la capital, mientras que las personas que se encontraban en la mina entonaron el himno nacional de Chile, generando reacciones en la prensa nacional e internacional. En 1992 el club celebró su centenario, pero en el ámbito deportivo parecía condenado al descenso a Tercera División sumado esto a una grave crisis económica que afectaba al club siendo una constante desde fines de los 70′, sin embargo, en octubre asumió la administración del club el empresario «microbusero» Reinaldo Sánchez, quien entre otras medidas contrató como entrenador al exjugador del club Armando Tobar, consiguiendo la permanencia al finalizar 11º, a cinco puntos del descenso.
El 1 de junio de 2015, Marcelo Díaz sería clave para evitar el descenso de categoría de su equipo al marcar un gol de falta al minuto 91′ del partido de vuelta frente al Karlsruher en los play-offs de ascenso y descenso, gol con el que llegaron a la prórroga para luego ganar el partido y mantenerse en la primera división. Ugarte de penal hizo el gol de los blancos en ese equipo naufragante. Ese mismo día Radio Cooperativa publicó declaraciones de Alejandro Bohn, uno de los dueños de la mina, en las que anunciaba que la empresa no estaba en condiciones de garantizar el pago de los salarios de los mineros, ni los seguros por accidente laboral, que desencadenaron severas críticas desde todos los sectores. Se les dotó con cascos especiales similares a los que usaban en labor diaria, Lentes filtrasol de alto grado para evitar daño por iluminación repentina, arneses y vendajes especiales en partes críticas del cuerpo como lo son las piernas esto en un esfuerzo por disminuir la probabilidad de que algún sobreviviente pudiese desarrollar trombosis venosa, además de seguirles suministrando bebidas isotónicas y otros medicamentos requeridos dada la situación.
Superadas estas dificultades técnicas, se precisó preservar la frágil salud de los 33 afectados, por lo cual se les suministró de ropa especial que les permitiría salir sin contratiempo alguno. Al día siguiente, se procedió con la re-hidratación de los mineros: Se les envió agua, bebidas isotónicas así como medicamentos. El jueves 7 de octubre el ministro de minería Laurence Golborne anunció que un posible contacto para rescatar a los mineros sería el sábado 9 de octubre, ya que la perforadora T-130, apodada como «Plan B», había superado el día anterior los 500 metros de perforación y hasta el día de la noticia ya llevaba 535 metros perforados, lo que indicaría que dentro de dos días la perforadora podría comenzar a sacar a los mineros atrapados. Unas horas más tarde, mediante una cámara de video para inspección establecieron contacto con los mineros, equipaciones futbol baratas captando las primeras imágenes de los atrapados. Las protestas de los familiares llevó a retrotraer la decisión y el gobierno designó al ingeniero André Sougarret, quien decidió realizar un pozo que comunicara la superficie con el refugio, mediante máquinas perforadoras de exploración minera, equipaciones futbol baratas para establecer contacto con los mineros atrapados.